PASEANDO POR LA HISTORIA DEL GUARICO

Aquiles Silva



02 de Mayo

02 de Mayo de 1780:

En esta fecha, la población de San José de Tiznados es erigido en Parroquia eclesiástica por el Obispo Mariano Marti, durante su visita pastoral; “acto que fue aprobado por el capitán general don Luís Unzaga y Amezanga” (09)

Para la época en el cual Velasco A. Mac Pherson, escribe su obra “Diccionario del Estado Miranda, (1891) “San José de Tiznados pertenece al Municipio del Distrito Bermudez, Sección Guarico, con 1.075 casas y 6.428 habitantes, distribuidos entre el pueblo cabecera y los vecindarios siguientes:  Las Yeguas, La Soledad, El Dividival, Mamporal, El Arenal, Las Palomas, Las Barrancas, Los Jobos, Félix, Almendronal, Los Monos, Sabanalarga, Bucare, Cocuizal, Corozal, Chaparral, La Majada, El Potrero, Jobogacho, Las Matas. Pantanito,  las Peñas y El Limón. El pueblo de San Jose de Tiznados, cabecera del Municipio, consta de 140 casas con 818 habitantes; esta situado a la orilla del rió Tiznados, a 100 metros sobre el nivel del mar, y con una temperatura de 28º 39’ del C, dista de la ciudad de Ortiz, al S. SO. 44, 50 kilómetros…” (09)

Don Tito  Sierra Santa Maria, en su obra Sitios Históricos del Estado Guarico, pag. 27, manifiesta:

Fundado en 1720. Situado a 140 metros sobre el nivel del mar, con una temperatura media de 27,3 grados-centígrados. Erigida en parroquia eclesiásticas por el Obispo Mariano Marti el 2 de Mayo de 1780…”

En Abril de 1787 Don Bartolomé Pérez de Ávila dono una parte de sus tierras al pueblo con el objeto de fomentar el vecindario y por ende, adelantar la fabrica de la iglesia que ya estaba en construcción. La historia nos dice La Negra Matea Bolívar, la que fue del niño Simocinto en Caracas. Se presume que la Negra Hipólita Boliva, la celebre Nodriza del Libertador, haya nacido también allí. (Falta constatarlo) En los predios de este municipio se encuentra una mata o ceja de monte llamada “El Rincón de los Toros” en donde se acampara el ejercito libertador la noche del 16 de Abril de 1818…” (08)

Reinaldo José  Bolívar, en su obra “Simón Bolívar: Hijo de  Hipólita, Pupilo de Matea”, escribe:

“El San José que llevo en mi mente ha cambiado de a poco pero ha cambiado, aunque hay muchas cosas que nos caracterizan y que deseamos se mantengan por siempre,  para nosotros, para nuestros hijos y nietos. Sobre todo el amor que nos sembraron por esta tierras llaneras y que nos hace desear, terminar algún día nuestras vidas contemplando el atardecer del rió Tiznados.”

Ese amor nos lo legaron nuestras madres y padres que preocuparon por manternenos vinculados con el pueblo que les vio crecer, aun cuando las necesidades y aspiraciones nos llevaran a otros sitios. Nunca, en nuestro caso, nuestra madre permitió que nos desvinculáramos de la familia, Todos aquí conocen lo importante que es para el guariqueño la familia, las madrinas, los padrinos, las comadres, los compadres, los compañeros…” (101)

Duente Consultada:

101.- “Simón Bolívar: Hijo de Hipólita, pupilo de Matea y otros Discursos Afrodescendientes”. Reinaldo José Bolívar. Ministerio del Poder Popular para Relaciones Exteriores. Despacho del Viceministro para África. Caracas. 2007.