Aquiles R. Silva P.
05 de julio
05 de julio
de 1811:
En esta fecha, aproximadamente a las 11 de la mañana, el Presidente de
Congreso Constituyente de Venezuela, Don Juan Antonio Rodríguez declara suficientemente debatida la materia
sobre la independencia del país y somete a la aprobación de la propuesta de la
independencia absoluta de Venezuela, la cual fue aprobada, casi por unanimidad,
con el único voto salvado del Pbro.
Manuel Vicente Maya, diputado por La
Grita
Dejemos al escritor venezolano, Eloy G.
González, quien en su Obra “Al Margen de la Epopeya ”, nos describa lo sucedido ese día:
“En la mañana del cinco de julio
apareció la sala del congreso llena de multitud, de los diputados sólo faltaban
Ustáriz, Méndez, de Guasdalito; Ribas Tovar, de Caracas; Mendoza, de Barinas, y
Quintana, de Achaguas. “Nunca tanta gente se había visto allí ni jamás se
observara en los oyentes el porte descomedido que en la ocasión tuvieron.
Vítores y aplausos ruidosos y sin fin
resonaban cada vez que tomaba o dejaba la palabra un diputado republicano: las
opiniones equívocas era acogidas con risotadas, silbos y amenaza”. Abrió la
sesión el señor Rodríguez e impuso a la asamblea de la respuesta del ejecutivo.
Miranda la apoyó, agregando que la noticia que acababa de recibirse, de la
retirada de Massena de España, obligaba a una pronta resolución. Cabrera
reclamó la asistencia de los ausentes, que se citasen en el acto para que concurriesen o diesen sus
excusas. (Fueron llamados). Don Juan
Bermúdez, del Sur de Cumaná, manifestó que le parecía prematuro el paso, por lo
indefensas en que se hallaban las costas de su provincia. Felipe Fermín de Paúl
propuso que se hiciese una ley previa, para contener los excesos de licencia, insubordinados y
libertinajes que podía producir la ignorancia; aprobó Antonio Nicolás Briceño,
de Mérida, añadiendo que aunque las discusiones eran públicas, las votaciones
fuesen secretas, para evitar irrespetos a aquel sitio, sagrado por el destino
que tuvo, sagrado por el que en el momento tenía; pidió como adición el señor Alamo una ley pasaportando a los
descontentos; apoyó el señor Peñalver
cuanto se había propuesto, menos al secreto de la votación; el señor Maya, de La Grita , declaró que sus
instrucciones le prohibían votar la cuestión; Briceño, de Mérida, dijo que sus
instrucciones eran iguales a la del señor Maya, pero que procedería contra
ellas, porque no dudaba que sus
comitentes aprobarían una medida dictada por la justicia y por la
necesidad. Abrió la discusión pública el señor Luís José de Cazorla, diputado
de Valencia...
(…) Después de una larga discusión,
donde participaron todos los diputados presentes, el Presidente creyó
suficientemente discutida la materia y propuso la votación. La declaratoria de
Independencia fue aprobada, con la excepción del doctor Manuel Vicente de Maya,
que salvo su voto. “El pueblo –se lee en el acta- fue un espectador tranquilo y
respetuoso de esta augusta y memorable controversia.” ()
En la tarde de este mismo día cinco de
julio se efectuó otra sesión, en la cual se designó para redactar la Declaración a
Roscio y a Isnardi, y estos tendrían que
presentarla en la sesión del día 7, donde sería leída, votada para su
aprobación o no, y de ser firmada, si era aprobada. (Imagen: 05
de julio 1811. Martin Tovar y Tovar)
Fuente Consultada.
19.- Agenda Histórica del Estado Bolívar 1979.
Gobernación del Estado Bolívar.